El retrato.



Mañana se clausura la exposición itinerante y aún no sabe qué extraña fuerza le ha atado al banquito durante semanas, inmóvil, mirando el cuadro. La composición es simple: un rostro femenino que parece escudriñarlo, una ventana, un paisaje urbano que le resulta familiar. Pero cada día percibe nuevos detalles. Hoy atisba dentro de la cabina telefónica la figura borrosa de un hombre alto. De repente recuerda esa plaza de Vancouver, y llevado de un súbito impulso, sale del museo, toma dos buses, y alcanza el auricular al quinto repiqueteo. La voz suena dulce: "Estás muy lejos, cariño, acércate...". Regresa y obediente se aproxima al retrato, pudiendo advertir ahora, en las pupilas de la mujer, el reflejo escorzado de la habitación donde se encuentra. Un armario macizo y dos sillones rojos le permiten reconocer la pensión y no puede evitar acudir de nuevo. No le sorprende ya encontrarla allí, de cuerpo entero, aunque sí descubrir que estaba pintando. También verse a sí mismo en el lienzo, inmóvil, observando, sentado en el escabel del museo.
- Disculpa las prisas -dice ella-, pero hoy mismo debía terminarlo. Y gracias por haberte acercado al cuadro, cielo: tanta distancia me impedía apreciar el color exacto de tus ojos.

14 comentarios:

  1. Divertido texto. Me gustó como siempre que te leo.
    Besos

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  2. Mis ojos, por haber sido puentes, son abismos.

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  3. Me encanta el original giro al final. ¿Lo has presentado a algún concurso? yo te premiaría.
    Los textos más extensos son más costosos pero también más gratificantes ¿no te parece? besicos

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  4. Gracias, Gabriel, me alegro mucho. Y sobre todo gracias por tu fidelidad, que ya son años (no muchos, pero años) caminando juntos por los mundos de las letras! Un abrazo enorme.

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  5. Jorge, si te gustan los abismos te regalo este poema de Emilio Prados, que es precioso. Para ti, que lo disfrutes mucho, gracias por venir:

    Me asomé, lejos, a un abismo…
    (Sobre el espejo que perdí he nacido.)

    Clavé mis manos en mis ojos…
    (Manando estoy en mí desde mi rostro.)

    Tiré mi cuerpo, hueco, al aire…
    (Abren su voz los ojos de mi sangre.)

    Rodé en el llanto de una herida…
    (Nazco en la misma luz que me ilumina.)

    Se coaguló mi llanto en sombra…
    Carne es la luz y el nácar de mi boca.)

    Dentro de mí se hundió mi lengua…
    (Siembro en mi cielo el cuerpo de una estrella.)

    Se pudrió el tiempo en que habitaba…
    (Brota en mi espejo un cielo de dos caras.)

    Huyó mi cuerpo por mi cuerpo…
    (Bebo en el agua limpia de mi espejo.)

    ¡A mi existencia uno mi vida!
    (Espejo sin cristal es mi alegría.)

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  6. Gracias, Bea!. Pues sí, lo hice para Esta noche te cuento, que tenía como tema el retrato en el mes de febrero. Es la primera vez que participo, pero veo que hay muchos y muy buenos. Creo que es un concurso bastante consolidado. De todas formas que te guste a ti ya es un premio para mí. Un abrazo enorme, gracias por pasarte y comentar!

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  7. Un giro impredecible, Luz.
    Muy prolijo y muy bien logrado como todos tus textos.
    Besos.

    PD: Qué alegría ver por aquí a mi querido amigo Jorge Curinao!!!!!

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  8. Gracias, Leo! Me alegro que haya habido sorpresita pues esto es una cosa que me resulta difícil de calcular cuando escribo. Pues yo mandándole un poema a Jorge y después lo leo y veo que es un excelente poeta! Me encantó su poesía, que no había tenido ocasión de conocer antes, por si se vuelve a pasar por aquí, es que en su blog no están abiertos los comentarios.
    A ti las gracias de nuevo y un abrazo grande!

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  9. Qué buen texto, Alba. Atrapa desde el primer momento. Como siempre, es un gusto leerte.
    Te dejo un beso :)

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  10. Realmente encantado con esta entrega que nos regalas. Siento que de este escrito brota mucha sentimiento y el final me encanta porque inviertes toda la perspectiva.

    Un gusto enorme leerte.

    Sergio.

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  11. qué bueno! genial ese final impredecible.
    Me encanta volver a leerte.
    Un abrazo!!!

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  12. Yadira, me alegro de que te guste! Otro beso para ti mi reina.

    Gatito, otro de los fieles. Qué alegría siempre contar contigo, tenerte por aquí. Gracias por esta y por todas tus lecturas, todas.

    Y un reencuentro ¡Hola, Enigma! Me encanta que te haya gustado lo impredecible del final, porque cuando tengo la intención de dar una sorpresa, nunca sé si será tan sorpresa jejejeje. Oye voy a buscar a ver si tienes blog, que yo también quiero leer lo que estás haciendo... Encantada de tenerte por aquí, un abrazo muy grande, bonita.

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  13. Como dice Sergio, es un cambio de perspectiva, de colores, de composiciones. Así se pinta un cuadro, así se recorre un cuadro. Es encantador, todos mis vitores para la la artista.

    (Hago fila para modelo).

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    Respuestas
    1. Es lo que hago a diario: pintarte mientas me hablas. Tendría que construir una serie de diapositivas. No serían ni la mitad de lindas que la realidad.
      Gracias! Me alegro de que te haya gustado, un besazo desde aquí.

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