'Numeración incorrecta', de Isabel González

"Un día me compraré un caballo de éstos. Rosa y con alas", dice la niña y señala, en el libro abierto sobre sus muslos, la foto de un flamenco. El hombre, alentado por tanta inocencia, se quita la chaqueta, estrecha su acercanza y escarba los bordes de la hoja sesgada mientras le explica que alguien arrancó una página entre definición e imagen, que después del doce no viene el quince y que imagínate si Genghis Khan hubiera dominado Mongolia sobre un ave de tan frágiles patas. Como si la niña no supiera. Como si no apretara en su puño la hoja extirpada. Como si las cosas no pudieran ser de otra forma.

LA HISTORIA DE AMOR MÁS BELLA JAMÁS CONTADA

- Te quiero.
- Soy una farola.
- Lo sé.

Agustín Martínez Valderrama.

 
  
 

Libélulas


Dedicado a todos los que un día pensaron en dejar de escribir..

 (Este poema fue publicado en el VIII cuaderno de Profesores Poetas, correspondiente al año 2012. Se puede ver la edición en pdf  aquí


30000 cristalinos en los ojos
para ver lo importante del mundo,
la imagen perfecta.

                                                 vuela
     Pero         vuela                                                                    vuela      
                                                                       vuela


                                                    a                     
                                                    b
                                                    i
                                                    r
                                                    r
                                                    a
                                              abajo                                           
                                                                      derecha
                         izquierda

Sin dirección ni rumbo
dejándose mecer por el viento.
             arriba
 Mirando 
 Mirando
             abajo
 mirando izquierda                  y derecha

                                                    mirando…
                           mirando…                                        mirando…..
                                                    mirando….

De súbito se para volitiva y suspendida
¿??????????????????????????????????????????????????????????????????????????
¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡

Se
        vuelca
                      al
                                estanque
                                                de
                                                        la
                                                             hoja
                                                                        cristalina
 y en fugaz vuelo rasante pone sus huevos de palabras: esos huevos, esos huevos,
 que son breves poemas, y darán una libébula…        libélulas…
                                                      otra libélula…                libélulas….          
porque un poema al fin y al cabo también es
una  mirada emocional y repentina,  y cristalina y perfecta.

Un caballito del diablo
se afana en dirigir su movimiento,
buscando la luz buscando.
Y a pesar de sus 30000 cristalinos…
mirando SIN ver, mirando

¡Quien fuera como ella una libélula!

Cuando muere un caballito del diablo,
apenas una pequeñísima desgracia.

Ay, pero cuando muere una libélula…

Cuando muere una libélula
se asfixia un fragilísimo espíritu poético,
ya no pone mas huevos de poemas de miradas
Yelmundosecontraeenundolordecrujido      porqueyanolomiraesalibélulalibélula.

De repente se encuentra
que ahora es
30.000 veces más
OPACO.

Toma

Toma: aquí están mis ojos.
Los desclavé con las uñas.
Toma: aquí están mis uñas.
Las apresé en este puño.
Toma: aquí está mi puño,
me lo mordí con los dientes,
me voy a arrancar los dientes,
los lamo con esta lengua,
se desgaja, cae al suelo,
y repta por las baldosas
como lagartija loca,
serpenteando a tu mano
mientras grita: toma, toma,
ojos, puños, dientes, lengua,
piel, entrañas, fruta, viento
y otros trozos de este cuerpo:
desde que nació fue tuyo,
si faltas se descompone,
únelos con tu saliva...
y sopla.

Pulmones para peces.

Los peces se han revelado como excelentes mascotas para acompañar a tus hijos y cuidar la casa. Sin embargo, los pulmones artificiales para peces siguen siendo bastante caros. En este tutorial te enseñamos a fabricar un pulmón artificial para tu pez de forma artesanal y con materiales muy económicos.

NECESITARÁS:

- Una botella de plástico (el tamaño dependerá de las medidas de tu pez)
- Un globo.
- Una goma elástica.
- El filtro de un grifo.
- Una pajita de refresco.
- Tijeras, pegamento.

INSTRUCCIONES.

- Recorta la parte de abajo de la botella con una medida que resulte cómoda para tu pez.

- Corta un trozo de globo lo suficientemente amplio para poder tapar la parte más ancha de la botella, ténsalo convenientemente y fíjalo a la botella de plástico con la goma elástica.


- Una vez tomadas las medidas, retira el globo y agujeréalo. Corta un trozo de pajita de unos cuatro centímetros e introdúcelo por el agujero. Asegúralo con un punto de pegamento y vuélvelo a montar en la botella.


- Desmonta el filtro del grifo como ves en la foto y recorta la parte de rejilla de manera que encaje en el otro extremo (cuello) de la botella.



Para poner en funcionamiento el pulmón tan solo tienes que rellenar este envase de agua mineral y enseñar a tu pez a sostener la pajita con la boca. No olvides cambiar el agua cada cierto tiempo. ¡Y ya puedes disfrutar de la compañía de tu mascota preferida a todas horas!